CUANDO NOS AGRADEZCAN...
Cuando nos agradezcan, evitemos decir "𝐝𝐞 𝐧𝐚𝐝𝐚", aunque sea una costumbre arraigada. La 𝐠𝐫𝐚𝐭𝐢𝐭𝐮𝐝 es una energía muy potente que abre puertas en niveles superiores. Cuando respondemos "𝐝𝐞 𝐧𝐚𝐝𝐚" frente a un agradecimiento, desperdiciamos una energía poderosa. De manera que cuando nos digan "𝐠𝐫𝐚𝐜𝐢𝐚𝐬" quizás es mejor responder: "𝐅𝐮𝐞 𝐮𝐧 𝐩𝐥𝐚𝐜𝐞𝐫, 𝐠𝐫𝐚𝐜𝐢𝐚𝐬 𝐚 𝐭𝐢, 𝐥𝐨 𝐡𝐢𝐜𝐞 𝐝𝐞 𝐜𝐨𝐫𝐚𝐳ó𝐧, 𝐦𝐞 𝐞𝐧𝐜𝐚𝐧𝐭𝐚 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐫𝐥𝐨, 𝐚𝐜𝐞𝐩𝐭𝐨 𝐭𝐮 𝐚𝐠𝐫𝐚𝐝𝐞𝐜𝐢𝐦𝐢𝐞𝐧𝐭𝐨”. De esta forma se produce un efecto multiplicador de esta gran energía luminosa. No es la felicidad la que nos hace ser agradecidos. Es ser agradecidos lo que nos trae la felicidad.